Pensando un nombre para mi proyecto.
Esta entrada es una de 2 partes. Primero veremos los tipos de nombres, ventajas y desventajas. En la 2da parte, veremos como, luego de tener distintos nombres pensados, podemos evaluar para seleccionar el mejor.
Todo proyecto conlleva distintos sub-proyectos: crear el logo, pensar en el servicio al cliente, cómo diferenciarnos de la competencia, posibles relaciones…cada acción con sus respectivos objetivos y dificultades, pero si hay algo que atormenta a muchos es lo que pudiera parecer una acción inofensiva: la ideación del nombre.El naming, como es llamado este proceso, es el ejercicio creativo del desarrollo y selección del nombre de nuestra empresa/proyecto. Es importante, pues de esto puede depender nuestro primer contacto con un potencial cliente.El buen nombre tienen características: es distintivo (se diferencia de otros nombres en el mercado para evitar confusión), tiene un significado (ya sea por la historia o valores de la marca), es orientado al futuro (contempla la posibilidad de crecer en otros sectores), protegible (no se encuentra registrado como propiedad de otra persona) y claro, está acompañado por un apoyo visual que lo refuerza y es lo que conocemos como “el logo”.La tarea de idear un buen nombre no es sencilla, se analizan factores como público meta, sector, competencia, lectura, interpretación de nuestro público, etc. Para tener un norte y un mejor inicio de búsqueda, podemos organizar los nombres en tipos: Descriptivos, evocativos, inventados, experienciales, acrónimos y de fundadores. Cada uno con sus ventajas y desventajas, las cuales veremos en esta primera entrada para luego evaluar el nombre que más nos conviene.





