Somos más de lo que decidimos estudiar

308092_10151122546081871_1719892044_n.jpg

Como estudiante y egresado de diseño industrial sufrí los comentarios y preguntas  consecuencia de estudiar una carrera poco conocida (¿y donde se puede trabajar con eso? ¿Quién te puede contratar? ¿Y de eso se vive en este país?).Esas preguntas siempre me han acompañado en la isla, como lo acompaña el “¿cuándo te casas?” a cualquier joven de mas de 25 años que ya haya terminado su universidad, y no crean que siempre tuve las respuesta: en muchas ocasiones me encontré cuestionando entre si me encontraba estudiando por que me gustaba mi carrera o la idea de lo que seria mi carrera.Si estudiaría para ser un profesional más de esos que tienen lindas paredes con títulos y diplomas decorativos o si pondría alguna vez mis conocimientos en práctica, hasta que un día me detuve y me cuestioné “¿qué conocimientos tengo? y fue donde todo claramente se iluminó.Dejé de ver mi pensum como materias que me darían un titulo y empecé a verlo como un conjunto de cursos cortos que me aportaban conocimientos en muchas áreas. Todo fue un cambio de perspectiva.En ese momento entendí que mi crecimiento profesional no está amarrado a que alguien me brinde un empleo y que mi universidad no me dio más que una base para seguir aprendiendo, sabiendo lo que estoy buscando o entendiendo que todos los días algo nuevo puede mejorarte como persona y profesional.

Dejé de llamarle “materias” a mis clases. Prefería llamarle “cursos”.Un “curso” de fotografía, uno de dibujo, dos de física…le daba una presencia menos pesada a las clases.

Dejé de ver mi carrera como una definición fría de Wikipedia: “Diseñador industrial es el que diseña productos que resuelven problemáticas de la cotidianidad, yara-yara-yara” y empecé a verla como un conjunto de conocimientos que no tenia que aplicar todos al mismo tiempo…solo saber que existían. No me interesan las líneas de producción de productos ni la generación de planos técnicos…pero tengo que saber que existen.No me gusta hacer maquetas pero ¿quien dijo que no puedo subcontratar o trabajar en colaboración con alguien que sí le guste? claro: es importante que sepa que ese proceso existe.

¿Quién dijo que si soy diseñador no puedo eventualmente aprender de contabilidad, programación o incluso administración? nadie, yo mismo me lo dije y en un momento me lo creí.

Después de graduarme, no he dejado de actualizarme en otras áreas que apenas vi, pero que no quiere decir que no pudiera visitar nuevamente: los libros aún existen y google es gratis.Como diseñador he trabajado en diseño de revistas, empaques, invitaciones, muebles, ilustración, diseño de personajes, fotografía, animación, redes sociales e incluso he impartido clases, seminarios, talleres y entrenamientos. He coordinado proyectos y asesorado otros que no necesariamente tienen que ver con el mundo del diseño de productos…no estudié la mitad de las cosas que menciono en esta lista y me impacta cuando algún colega me dice “pero en la universidad no nos dieron eso” a lo que siempre pregunto ¿sólo se aprende en la uni?Nuestro titulo no es una limitante: es un inicio de nuestro desarrollo profesional enfocado en un área.  No planeo irrespetar a otras carreras y decir que todos somos lo mismo: Cada quien decidió un camino y especializarse en él. Sin embargo, somos mas que lo que decidimos estudiar. Somos los limites que decidimos ponernos a nosotros mismos.